Por Jean-Louis Comolli*
“En el cine contemporáneo, y en la
historia del cine, hay una lucha, un conflicto, entre dos tendencias:
una va hacia el espectáculo, la satisfacción de la pulsión
escópica y la acumulación de lo visible infinitamente; y la otra
tendencia es más de “escritura cinematográfica”, que está
contrariamente colocada en la práctica de la rarefacción, de la
frustración de la pulsión escópica, de la introducción de lo
no-visto en lo visto. (…) Poner al espectador en esta posición de
frustración no significa hacerlo sufrir. Al contrario, significa
atribuirle un plus-de-goce, en la idea de que algo de pulsión puede
y debe ser elaborado. Y esta elaboración es una amplificación del
sujeto. Por el cual el cálculo del espectáculo se nos puede
aparecer como un cálculo anti-productivo. Acumulando lo visible
sobre lo visible no se estimula al espectador, más bien se da lo
contrario. La lógica del capital y del mercado, del espectáculo, en
definitiva, no desarrolla la subjetividad, sino que la reduce”.
*En una entrevista realizada por Bruno
Roberti, publicada en el libro Cine y filosofía: las entrevistas de
Fata Morgana. (Ed. El cuenco de plata. Buenos Aires).
La imagen pertenece a "Taxi", notable film de Jafar Panahi.