Dejo caer la arena
Conté con los dedos de mi mano
las
veces que tuve, no las que amé.
Las
yemas de los dedos
se
quedaron mirándome, las líneas
de la
mano rieron (¿amé
lo que
tuve? ¿Quise decir
quiero
un poco
de esto
o de aquello,
gané,
perdí semejante
generosidad?).
Ahora
que me aferro
a lo
que tengo -como a un poco
de
nada-,
veo
líneas que una burla desecha,
y
lenta, tiernamente abro
el
puño, dejo caer
la
arena, vuelvo a tomarla.
Irene
Gruss
En la imagen: la extraordinaria Melissa McCarthy en Can you ever forgive me?, film de Marielle Heller.
No hay comentarios:
Publicar un comentario