“¿Qué es un acto humano sino una ilusión cuando dos interpretaciones distintas son igualmente válidas? Una ilusión, sí, un gesto insinuado contra la pantalla nebulosa de una realidad que solo la naturaleza ilusoria de la división torna palpable. ¿Acaso algún otro novelista había planteado este problema antes que Pursewarden? No lo creo.
Y mientras pensaba en aquellas cartas terribles, tropecé de pronto con el verdadero sentido de mi relación con Pursewarden y con todos los escritores. Comprendí que nosotros, los artistas, formamos una de esas patéticas cadenas humanas que los hombres organizan para pasarse baldes de agua durante un incendio, o para llevar hasta la playa un bote salvavidas. Una ininterrumpida cadena de humanidades para explorar los tesoros ocultos de la vida solitaria, y ofrecerlos a una comunidad indiferente, incapaz de perdonar; unidos todos, maniatados por la gracia.”
Lawrence Durrell (Fragmento de su novela “Clea”)
En la imagen: El sol del membrillo, film dirigido por Víctor Erice.
No hay comentarios:
Publicar un comentario